Fue a mediados del siglo XIX cuando la industrialización empezó a tener la necesidad de crear una línea férrea para comunicar la cuenca minera de carbón de Córdoba con las fábricas de la costa de Málaga. Esta línea se terminó en 1865, atravesando el desfiladero de los Gaitanes por túneles y viaductos.
A finales del siglo XIX, se buscan alternativas al carbón para satisfacer la creciente demanda energética. El ingeniero Rafael Benjumea, recibe el encargo de aprovechar el desnivel existente entre la entrada y la salida del desfiladero para producir electricidad. La obra, terminada en 1906, consistía en desviar el agua a la entrada del Gaitanejo, forzarla a circular durante 3 Km por un canal hasta la salida de los Gaitanes, para dejarla caer desde más de 100 m de altura, hasta la primitiva central "Salto del Chorro". Un camino adosado a la roca, ayudaba a las tareas de mantenimiento del canal. Por los pequeños balcones que aún existen en el tramo superior, el camino recibió el nombre de "Balconcillos de los Gaitanes".
En 1920, se construyó el pantano del Chorro. El 21 de mayo de 1921, el rey Alfonso XIII, colocó la última piedra del embalse del Chorro y recorrió el Camino de los Balconcillos.
Por su obra, el rey concedió a Rafael Benjumea el título de Conde de Guadalhorce. Desde 1953, el primer pantano lleva este nombre, y el vertiginoso camino de servicio, "Caminito del Rey"
Sé que hay muchos detractores del arreglo de este camino, pero sería una lástima que este paraje tan espectacular solo lo pudieran disfrutar escaladores y deportistas extremos. Afortunadamente, yo he podido disfrutarlo de las dos maneras, la primera en su estado ruinoso y adrenalínico y la segunda, con mi familia. De no haberlo arreglado, me hubiese quedado a medias.
Aquí os dejo unas fotos del ANTES Y AHORA.
Seguramente estas flores ya no se criarán en el camino"Balconcillos de los Gaitanes"
Y estas dos para terminar
¿Habéis encontrado las diferencias?
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